¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a usar un nebulizador?
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo a usar un nebulizador?
A veces los bebés y los niños pequeños tienen problemas para recibir el tratamiento del asma a través de un nebulizador. Los niños necesitan quedarse quietos durante 5 a 15 minutos mientras inspiran el medicamento. ¡Cualquier persona que tenga un niño pequeño sabe lo difícil que puede ser conseguirlo!
Estos consejos pueden hacer que el tratamiento resulte más llevadero:
- Haga que el uso del nebulizador forme parte de la rutina diaria. Utilice el nebulizador a la misma hora (u horas) cada día, para que su hijo sepa qué esperar.
- Dé al tratamiento un nombre especial, como el “momento para respirar mejor”. Trate de que su hijo pase un rato divertido mientras usa el nebulizador: léale cuentos, cántele canciones o saque algún juguete especial reservado solo para los momentos en que utilicen el nebulizador.
- Vean juntos un programa de televisión.
- Deje que su hijo decore el nebulizador con adhesivos.
- Pruebe a que su hijo esté sentado en una silla alta. Si eso no funciona, tal vez prefiera sentárselo en la falda.
- Si se trata de un bebé muy movedizo, pruebe a usar el nebulizador mientras esté dormido.
- Si a su hijo le asusta la mascarilla, puede endulzarle la experiencia contándole que se trata de una “máscara de piloto” o de una “máscara de astronauta”. También pueden ver una película sobre pilotos o sobre viajes espaciales y utilizar la jerga especial propia de esas profesiones como “motores en marcha” justo antes de conectar el nebulizador. También puede comprar mascarillas con forma de dragón o de otros animales.
- Si su hijo es lo bastante mayor, anímelo a que lo ayude a ponerse la mascarilla, a sostener el tubo y/o a encender el aparato.
- ¡Elogie a su hijo por el trabajo bien hecho! También puede darle a su hijo un pequeño “premio” (como adhesivos o un juguete sencillo) a modo de recompensa por su cooperación.