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Los dolores torácicos (o pectorales) pueden estar causados por muchas cosas, desde un leve tirón muscular hasta el asma. Dependiendo de la causa del dolor, los síntomas pueden diferir. Es muy raro que los dolores torácicos en los niños sean el signo de un problema de corazón. 

Signos y síntomas

• opresión 
• molestias 
• sensación de ardor o quemazón 
• dolor al hacer respiraciones profundas 
• tos
• resuello o respiración sibilante (hacer “pitos” al respirar)

¿Qué hacer?

• Llame al médico si su hijo tiene dolores torácicos con regularidad. 

Haga que su hijo reciba ayuda médica urgente si:

• El dolor le ocurre mientras está haciendo ejercicio físico. 

Su hijo: 

• respira con dificultad o de forma rápida
• tiene un ritmo cardíaco acelerado o palpitaciones 
• nota presión dentro del pecho 
• tiene mareos o se desmaya
• tiene una tonalidad azulada o gris alrededor de los labios 

¡Anticipar es la mejor prevención!

Es difícil evitar todos los dolores pectorales porque tienen muchas causas posibles. Pero usted puede: 

• Asegurarse de llevar al día el calendario de vacunación de su hijo para prevenir aquellas infecciones que pueden causar dolores en el pecho. 
• Seguir el plan de tratamiento indicado por el médico si su hijo tiene asma. 
• Evitar los alimentos que le causen indigestión. 
• Asegurarse de que su hijo se haga una revisión deportiva antes de practicar cualquier tipo de deporte organizado.