Reanimación cardiopulmonar (RCP)
¿Qué es la reanimación cardiopulmonar?
La reanimación cardiopulmonar (RCP) es una técnica para salvar vidas que se usa en situaciones de emergencia cuando una persona deja de respirar o su corazón deja de latir.
La RCP combina compresiones pectorales (presionar el pecho sobre el corazón) y respiraciones de rescate (respiración boca a boca). Si a alguien no le está circulando bien la sangre o no está respirando bien, la RCP puede ayudar a que le llegue sangre rica en oxígeno al cerebro y a que vuelva a respirar.
¿Cuándo ayuda la RCP?
La gente puede necesitar que le hagan RCP en muchas situaciones de emergencia, como las siguientes:
- accidentes
- estar a punto de ahogarse
- asfixiarse
- intoxicarse
- ataque de corazón (o infarto de miocardio)
- sobredosis de droga
- inhalación de humo
- lesiones por electrocución
- síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL)
La RCP es más eficaz cuando se inicia lo antes posible, pero antes se debe decidir si una persona la necesita. Se debe hacer cuando una persona deja de respirar o su corazón deja de latir. Recuerde que también debe llamar al servicio de emergencia 911.
¿Cuáles son las tres partes de la RCP?
Las tres partes fundamentales de la RCP son: compresiones, vías respiratorias y respiración.
Compresiones. Las compresiones pectorales pueden ayudar a que la sangre vuelva a circular hacia el corazón, el cerebro y otros órganos. La RCP se inicia con 30 compresiones pectorales, y va seguida de dos respiraciones de rescate. Según la Asociación Americana del Corazón (AHA, por su sigla en inglés), las compresiones deben ser “fuertes, rápidas y hechas en el centro del pecho”.
Vías respiratorias. Después de hacer 30 compresiones pectorales, se deben comprobar las vías respiratorias de la persona para asegurarse de que están abiertas y despejadas, es decir, que el aire puede llegar desde la boca hasta los pulmones. Las vías respiratorias pueden estar obstruidas por la lengua cuando se pierde la conciencia o por un alimento u otro objeto extraño.
Respiración. Las respiraciones de rescate se inician después de las 30 compresiones pectorales, una vez se ha comprobado que las vías respiratorias están despejadas. Las respiraciones de rescate se hacen introduciendo aire por la boca de la víctima para que le llegue a los pulmones. El aire se debe introducir en los momentos adecuados y luego se deben buscar signos de vida.
¿Cómo puedo aprender más cosas sobre la RCP?
Todos los padres deben saber cuándo y cómo hacer una RCP. Si se hace correctamente, la RCP puede salvar la vida de una persona. Permite que la sangre de la persona llegue al corazón, al cerebro y a otros órganos y que el paciente empiece a respirar hasta que los profesionales de la salud le puedan proporcionar un mayor soporte vital.
Para encontrar un curso de RCP en su localidad, revise los hospitales cercanos y las sedes locales de la Asociación Americana del Corazón y de la Cruz Roja Americana. También puede buscar por internet:
- La Asociación Americana del Corazón ofrece cursos de RCP de diferentes niveles. La formación puede ser presencial, en línea o combinada (en línea y presencial). Un curso básico cubre la RCP y las asfixias de adultos, niños y bebés. Se practica con maniquís y se pueden hacer preguntas y recibir una instrucción personalizada.
- La Cruz Roja Americana ofrece cursos de RCP de diferentes niveles. La formación puede ser presencial, en línea o combinada (en línea y presencial). Los materiales actualizados que se ofrecen en línea lo pueden ayudar a mantener al día sus técnicas de RCP.
La RCP es una habilidad que se debe practicar. Por eso, es sensato repetir el curso por lo menos cada 2 años para mantener activos sus conocimientos y ponerlos en práctica. Eso también lo ayudará a mantenerse al día sobre los nuevos avances y descubrimientos que se van haciendo en el campo de la RCP.
Recuerde que hacer un curso de RCP, e irlo repitiendo cada 2 años, le puede ayudar a salvar la vida de su hijo o de otra persona algún día.