¿Y si mi hijo no se toma la medicación para el asma?
¿Qué pasa cuando los niños no se toman los medicamentos del asma?
Una de las mejores formas de ayudar a los niños a controlar su asma, aparte de evitar sus desencadenantes, es asegurarse de que se toman sus medicamentos según las indicaciones de sus médicos. Los niños se deben medicar siguiendo esas indicaciones, incluso aunque se encuentren bien.
Las consecuencias de saltarse la medicación variarán dependiendo del tipo de medicación de que se trate.
¿Y si mi hijo se salta una dosis del medicamento de control a largo plazo?
El medicamento de control a la largo plazo hace efecto a lo largo del tiempo, manteniendo despejadas las vías respiratorias y previniendo los síntomas asmáticos. Se suele tomar cada día.
Saltarse una dosis del medicamento de control a largo plazo (también conocido como medicamento preventivo o de mantenimiento), aunque parezca no tener un efecto inmediato o importante, con el tiempo, puede hacer que las vías respiratorias se irriten e inflamen más, sobre todo si el niño entra en contacto con un desencadenante. Saltarse una dosis del medicamento aumenta el riesgo de que el niño tenga una crisis asmática o ataque de asma.
Asegúrese de que su hijo se toma siempre su mediación de control siguiendo las recomendaciones del médico para prevenir las crisis asmáticas.
¿Y si mi hijo se salta una dosis del medicamento de alivio rápido?
El medicamento de alivio rápido surte efecto de inmediato, frenando los síntomas asmáticos cuando ocurren. Estos medicamentos se inhalan y actúan directamente en los pulmones. En cuestión de minutos, despejan las vías respiratorias y alivian síntomas como el resuello, las sibilancias (hacer “pitos” al respirar), la tos y la falta de aire.
No tomarse del medicamento de alivio rápido (también conocido como “medicamento de rescate” o “medicamento de efecto inmediato”) durante una crisis asmática puede ser muy perjudicial. El niño puede no ser capaz de respirar profundamente y sus vías respiratorias se pueden seguir estrechando hasta el punto de tener que acudir a un servicio de urgencias.
Asegúrese de que su hijo tiene siempre a mano su medicamento de rescate, para que lo use en caso de emergencia.
Involucre a su hijo
Hacer partícipes a los niños de su tratamiento del asma los ayudará a tomarse sus medicamentos cada vez que se los tengan que tomar. Explique a su hijo cómo actúan sus medicamentos y qué cantidad debe tomar. Tener un plan de acción contra el asma los puede ayudar, a ambos, a aprender lo que necesitan saber.
También es importante que usted haga hincapié en estos dos conceptos clave:
- Su hijo debe tomar su medicamento de control a largo plazo según las indicaciones de su médico, incluso cuando se encuentre bien.
- Su hijo debe tener siempre a mano el medicamento de alivio rápido, esté donde esté.
Usted lo puede ayudar si le recuerda que se tome la medicación de control a largo plazo según las indicaciones del médico y si lleva consigo la medicación de alivio rápido cuando salgan de casa. También se debe asegurar de no se quede sin medicamentos.