Consejos para tratar la gripe
¿Qué es la gripe?
La gripe (influenza) es una infección viral muy contagiosa de las vías respiratorias (nariz, garganta y pulmones). La gripe puede hacer que una persona se sienta bastante mal hasta durante hasta más de una semana.
¿Cómo se trata la gripe?
La gripe no suele requerir tratamiento médico. A veces, los médicos recetan un medicamento antiviral a algunas personas que tienen la gripe. Este medicamento funciona mejor si se administra durante los dos primeros días de la enfermedad. Y puede aliviar los síntomas gripales y acortar la enfermedad en un par de días. Pero tiene algunos efectos secundarios; por lo tanto, consulte las ventajas y los inconvenientes de esta medicación con el médico de su hijo.
Los médicos no recetan antibióticos para la gripe. Los antibióticos solo son eficaces contra las bacterias, no contra los virus.
¿Cómo puedo ayudar a mi hijo?
Si su hijo contrae la gripe:
- Ofrézcale líquidos en abundancia. La fiebre y la pérdida del apetito son frecuentes en la gripe, y pueden causar deshidratación.
- Anime a su hijo a descansar en la cama o en un sofá con una buena cantidad de revistas, libros, música tranquila y tal vez sus películas preferidas.
- Vista a su hijo con capas de ropa para que se pueda quitar o poner capas cuando tenga fiebre o escalofríos.
- Dele paracetamol o ibuprofeno para el dolor y la fiebre. (No le dé aspirina, ni ningún otro medicamento que contenga salicilatos, a menos que se lo indique su médico. La aspirina se ha relacionado con una enfermedad muy poco frecuente pero grave llamada “síndrome de Reye“.)
- Puede darle a su hijo medicamentos de venta sin receta médica para la tos o el resfriado si tiene más de 6 años de edad y su médico le da el visto bueno. Siga atentamente las instrucciones del prospecto para darle la cantidad adecuada. No administre estos medicamentos a niños menores de 6 años porque les pueden causar reacciones adversas.
- Usar un humidificador de vapor frío le pude ayudar a aliviar la tos, la congestión y la secreción nasal de su hijo. Límpielo después de cada uso o, por lo menos, una vez al día.
- La miel puede ayudar a aliviar una tos difícil de remitir en los niños mayores de 12 meses de edad. Dele a su hijo de una a dos cucharaditas de miel por la noche. No dé miel a bebés menores de 12 meses de edad.
- Para tratar la congestión nasal (nariz tapada):
- En los bebés: Aplique unas pocas gotas de solución salina (agua salada) dentro de la nariz de su hijo, luego succione el moco con una perita. Haga esto no más de 2 a 3 veces al día, para que el interior de la nariz de su bebé no se inflame ni le duela.
- En los niños mayores: Rocíe la nariz con solución salina en espray 2 veces al día.
Cuide de usted mismo y de otras personas de su familia. Si aún no lo ha hecho, hable con su médico sobre la posibilidad de ponerse la vacuna antigripal, tanto usted como otros miembros de su familia. Se recomienda que reciban esta vacuna cada año todas las personas a partir de los 6 meses de edad. Así mismo, lávense las manos a fondo y con frecuencia, sobre todo después de tocar pañuelos usados.
Si el médico de su hijo le receta medicamentos para aliviar los síntomas, llame a la farmacia antes de pasar a recogerlos. Cuando la gripe es muy fuerte, algunas farmacias no pueden tener todos los medicamentos en stock.
Los niños que están enfermos deben quedarse en casa y no ir a la guardería o la escuela hasta que:
- se sientan mejor
- lleven 24 horas seguidas sin fiebre y sin tomar ningún medicamento para bajar la fiebre.